Camille et Juan, un mariage unique
La de Juan y Camille fue sin duda una boda singular en muchos aspectos, especialmente por el encanto especial que solo los franceses con su particular sentido de la estética saben dar a cualquier evento. Pero también porque los novios no siguieron el guión habitual en este tipo de celebraciones. Para empezar decidieron casarse a la hora de la siesta, a las tres de la tarde en el Palacio de Caranceja, una preciosa Casona Montañesa, lugar elegido por la pareja. La ceremonia tampoco siguió el protocolo habitual de otras bodas, pues fue un acto muy familiar y entrañable, donde no ofició ni el cura ni el alcalde, sino los familiares y amigos más cercanos, que con sus palabras de cariño consiguieron que la ceremonia fuera realmente emotiva.
Camille lucía radiante con su vestido de Chinda Roger, que también realiza sus creaciones para la Casa Dior. Y Juan eligió un cómodo traje de chaqueta en tono beige tostado de Julien de Caurel (Rennes), con pajarita de Liberty en tonos naranjas y verdes, zapatos marrones con cordones naranjas que le daban un toque muy personal. No es por casualidad, que la novia sea bretona y la pareja resida en París, porque todos los detalles de la boda y el estilismo de los invitados destilaban “Charme francaise”.
Fue una boda muy íntima, relajada y sin prisas. Los novios querían disfrutar del día con su familia y amigos y solo dedicaron un rato para realizar el reportaje de la pareja en la finca del palacio y las fotos de grupo en el jardín. Terminada la sesión de retratos familiares, Camille aprovechó el momento para lanzar su precioso ramo de La Silvestre entre sus amigas. Y antes de comenzar el banquete realizamos una última foto de todos los asistentes bajo la gran palmera del jardín.
Espero que todos los amigos venidos de Francia e Inglaterra disfrutaran del día tanto como yo mientras realicé este reportaje que aquí comparto con los mejores momentos de esta boda singular, la de Camille y Juan.
¡Enhorabuena pareja! y gracias por contar conmigo.
Bon voyage ...
Lucía Laínz, Santander
Camille était radieuse dans une robe créée par Chinda Roger, couturière pour de très grandes maisons de mode. Juan avait choisi un costume sur-mesure beige de Julien de Caurel (Rennes), avec un noeud papillon Liberty dans des tons orange et vert, des chaussures marrons à lacets oranges qui lui ont donné une touche très personnelle. Ce n'est pas un hasard que la mariée soit Bretonne et que le couple réside à Paris, car chaque détail du mariage et le style des invités respirait le "Charme à la française".
Ce fut un mariage très intime, détendu et tranquille. Les mariés souhaitant profiter au maximum de la journée avec leurs familles et leurs amis, ils ont dédié un court moment pour les photos de couple dans le jardin du Palacio et pour les photos de groupe dans le jardin. Après cette séance photos, Camille en a profité pour lancer son joli bouquet créé par La Silvestre à ses amies. Avant le diner, nous avons effectué une dernière photo de tous les invités à coté du grand palmier.
Bon voyage ...
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D'ersu (martes, 12 julio 2016 12:43)
Muchas muchas gracias Lucia.C est magnifique.
Helene la madre de Camille