El pasado fin de semana tuvimos el gusto de recibir la visita de Sofía Moro y David de la Torre, una pareja genial que durante el pasado año han dirigido el proyecto fotográfico que, desde Espacio Imagen, hemos venido desarrollando en Santillana del Mar.
Nuestro objetivo era retratar la Villa a través de sus habitantes y alejarnos en lo posible de las habituales estampas turísticas que todos hemos visto de Santillana.
En este proyecto que he tenido el placer de coordinar, hemos participado 27 fotógrafos. Durante todo el invierno hemos ido retratando a los vecinos del pueblo, desde las autoridades locales hasta los artesanos, comerciantes, hosteleros, ganaderos…
Finalmente nuestro trabajo se ha materializado en una exposición colectiva en el Palacio de Caja Cantabria en Santillana y la publicación de un libro de fotografías, que recoge las mejores imágenes del proyecto.
El diseño de David de la Torre y la edición de Sofía Moro han sido fundamentales para el éxito del proyecto, editado por “La Vieja Era”, que por fin ha visto la luz y ya se encuentra disponible en la sala de exposiciones y en la web de la editorial.
Hemos de agradecer también el apoyo incondicional de Juan Muñiz y su equipo de la Obra Social y Cultural de Caja Cantabria, así como la colaboración literaria de Marcos Díez.
No ha sido fácil cohesionar el trabajo de un colectivo tan amplio de fotógrafos y conseguir que los vecinos del pueblo se prestaran a abrirnos sus casas y sus corazones para permitir ser retratados en la intimidad de sus quehaceres cotidianos, pero al fin hemos conseguido mostrar una Santillana más auténtica, alejada de los estereotipos que cualquier turista puede encontrar. Lo mejor de todo ha sido ver como todos los vecinos de la Villa han visitado las salas de exposiciones de Caja Cantabria. La mayoría no lo había hecho antes y han salido encantados con su libro “Santillanenses” bajo el brazo. Orgullosos de haber sido protagonistas de un proyecto que trasciende las habituales estampas de una villa que tiene mucho más que mostrar que sus calles empedradas, sus monumentos y su patrimonio rupestre. Por eso os recomiendo vivamente una visita a la exposición, que estará abierta al público hasta final de enero, para que conozcáis un poco mejor este enclave singular a través de sus vecinos.
Os esperamos…
Lucía Laínz
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